Miscelánea de un trovador

Abstract

Deber ineludible del hombre es el amor filial. Albergado en lo íntimo del corazón por la madre Naturaleza, en forma de dulcísimo sentimiento, fue, un día, grabado como formidable precepto, por la mano de Dios, en la bruñida piedra que Moisés le presentara sobre el monte Sinai ¡Pasión y ley! He aquí la doble esencia de ese amor sagrado: incorruptible fruto del .Árbol de la Vida,· fruto en el cual se han condensado, dirélo así, los jugos todos y los perfumes de la tierra y cuya sagrada inmunidad garantizada fue por la Providencia, con esos legendarios relámpagos del Sinaí y con ese tremendo horror de las tinieblas exteriores, que diría el evangelio.